"... Las torvas montañas parecían lejanas, y estábamos acercándonos a la cumbre de una colina empinada, en cuya cima había un castillo como el que menciona Jonathan en su diario. Me alegré y atemoricé al mismo tiempo; pues ahora, para bien o para mal, el fin está cerca"
(Notas de Van Helsing)
Drácula, Bram Stoker
Terra de bosques, castelos e igrexas fortificadas; rodeada de prominentes montañas; esta rexión de Rumanía de orixe saxona é moi rural e ten pobos preciosos e fermosas ladeiras. Pero a fama de Transilvania non ven das súas virtudes, ven das historiase e lendas que se inspiran nela.
-x-
Tierra de bosques, castillos e iglesias fortificadas; rodeada de prominentes montañas. Esta región de Rumanía de origen sajón es muy rural y tiene pueblos preciosos y hermosas laderas. Pero la fama de Transilvania no viene de sus virtudes, viene de las historias y leyendas que se inspiran en ella.
Castelo de Peles |
Viscri |
Igrexa fortificada de Viscri |
Tumbas de Transilvania |
Torreon da igrexa |
Sinaia |
Sighisoara |
O Castelo de Bran |
Pasos polo cemiterio |
As fiestras que vixilan |
Sibiu |
A elegancia de Brasov |
A rexion máis rica
de Rumanía estivo históricamente ligada ao imperio Austro Húngaro. De
feito, existe unha importante minoría magiar na actualidade entre a súa
poboación. Esta orixe deixa pobos con arquitectura
e mentalidade saxona. Transilvania non deixa de ter certo anhelo
independentista (animado na actualidade por Hungría, gobernada pola
ultradereita de Orban, na Hungría), xa que consideran que Valaquia e a
capital Bucarest son máis atrasadas e corruptas. Estás
tensions territoriales superanse con certas concesions culturales e
económicas. De feito, na actualidade o presidente de Rumanía é saxon, de
Sibiu.
As vilas saxonas
(Sibiu, Brasov, Sighisoara, Biertan, Prejmer...) están construidas a partir
de ciudadelas amuralladas para a defensa, ou ben rodeando igrexas
fortificadas nas que refuxiar a población nos ataques.
Esta disposición é o resultado de estar continuamente asediadas polas
civilizacions limítrofes. O exemplo máis curioso quizáis sexa Viscri,
pequeño pobo anclado no tempo.
Sighisoara é a
cidade de orixe do famoso príncipe Valaco Vlad Draculea, tamén chamado
Vlad Tepes, o empalador. Sobre este personaxe escribironse moitas lendas
(a maioria delas por parte dos seus enemigos, presentandoo
como un sanguinario)
Vlad foi entregado
polo seu pai cando era neno aos turcos. Durante este secuestro foi
humillado e violado polos otomanos. De ahí ven o seu odio a oriente.
Cando retornou a Valaquia e conseguiu o poder, convertido
en príncipe valaco, foi un implacable gobernante que castigaba
exemplarmente aos delincuentes, traidores e inimigos. Especialmente os
turcos.
Practicaba o axuizamento mediante o empalamiento. Introducindo
un pau polo ano sen tocar ningún órgano vital, e clavabase
no chan, deixando así ao torturado ata a morte. Con este método o
condenado agonizaba as veces durante dias desangrándose ou consumido
polas súas propias bacterias.
A pesar de usar tan
salvaxes métodos, foi moi respectado durante o seu reinado. Diciase que
non había delincuencia, que se podía deixar un saco con ouro aberto na
rua que ninguen o ía coller (non era pra
menos).
Vlad Tepes é un eroe nacional en Rumanía, xa que foi o primeiro
dirixente que se negou a pagar os tributos aos otomanos (alimentos e
nenos, aos que alistaban no exercito turco). Repeleu os ataques de
oriente, e empalou os prisioneiros ao longo do Danubio,
frontera natural con Bulgaria e Dobrogea. Ver este espectáculo botaba
atrás ao inimigo otomano, asustado con semellante recibimento
fronteirizo.
Din en Valaquia que
deixaba pan mollado en viño ao lado dos cadáveres, para facer pensar que
bebía o sangue dos mortos. Ademáis, co empalamento os corpos quedaran
desangrados e brancos, e as veces con marcas
moradas no pescozo debido ao límite da estaca que non chegaba a
sobresalir. Estas imaxes arrepiantes alimentaban a imaxinación e as
lendas vampíricas.
O que rematou de
darlle a fama mundial a Vlad Tepes foi Bram Stoker. O escritor irlandés
basouse nel para o vampiro da sua novela Drácula, e ambientou o libro na
sua rexion natal, Transilvania. De feito, o
término “Dracul” non ten nada que ver con vampiros, significa “Dragón”
Actualmente, Drácula
(ou Vlad Draculea) é un reclamo turístico de primer orde, e é
insistentemente explotado pola próspera e turística Transilvania.
Un dos exemplos de
como rendabilizan ao vampiro é o Castelo de Bran, aproveitando a falsa creencia
popular de que Vlad Tepes viviu nesta mansión. En teoría foi esa a
tenebrosa fortaleza que inspirou a Bram Stoker
para ambientar a residencia de Drácula. O resultado: a pequena vila de Bran é un circo turístico. Ás autoridades rumanas non lle fai moita gracia
que este Castelo sexa un parque vampirico-tematico, xa que foi
simplemente un palacio, con aspecto tétrico
por estar enriba de un penedo. Pero a realidade é que o príncipe valaco
nunca viviu ahí.
A residencia real de
Vlad Tepes foi o Castelo de Poenari, en Valaquia, baixo os montes
Fagaras dos Cárpatos. É bastante máis inaccesible que o Castelo de Bram.
Iso si que foi una fortaleza. Na actualidade
está en ruinas, e os que amenazan aos humanos non son os vampiros, se
non a presencia de osos pola zona, que impiden a visita.
Mención aparte
merece Sinaia, a vila máis coidada e elegante de Rumanía. E das máis
visitadas. De feito chegar a ela ou aparcar pode ser unha odisea na que
hai que armarse de paciencia debido ao intenso tráfico
Rumano, e as continuas retencions orixinadas por accidentes, por cruces
a nivel ou por intersecciones coas vías do ferrocarril.
-x-
La región más
rica de Rumanía estuvo históricamente ligada al imperio Austro-Húngaro.
De hecho, existe una importante minoría magiar en la actualidad entre su
población. Este origen deja pueblos con arquitectura
y mentalida sajona. Transilvania no deja de tener cierto anhelo
independentista (animado en la actualidad por la ultraderecha de Orban,
en Hungría), que considera que Valaquia y la capital Bucarest son más
atrasadas y corruptas. Estas tensiones territoriales
se superan con ciertas concesiones culturales y económicas. De hecho,
en la actualidad el presidente de Rumanía es sajón, de Sibiu.
Las poblaciones
sajonas (Sibiu, Brasov, Sighisoara, Biertan, Prejmer...) están construidas a
partir de ciudadelas amuralladas para la defensa, o bien rodean una
iglesia fortificada en la que se refugia la
población en caso de ataque. Esta disposición es el resultado de estar
continuamente asediadas por las civilizaciones limítrofes. El más
curioso ejemplo quizá sea Viscri, pueblo anclado en el tiempo.
Sighisoara es la
ciudad de origen de Vlad Draculea, también llamadoVlad Tepes, el
empalador. Sobre este personaje se escribieron muchas leyendas (la
mayoría de ellas por parte de sus enemigos, en las que
se le presentaba como un sanguinario)
Vlad fue
entregado por su padre cuando era niño a los Turcos. Durante este
secuestro, fue humillado y violado por los otomanos. De ahí viene su
odio hacia oriente. Cuando fue devuelto a Valaquia, y consiguió
el poder, convertido en príncipe valaco, fue un implacable gobernante
que castigaba ejemplarmente a los delincuentes, traidores y enemigos.
Especialmente los turcos.
Practicaba el ajusticiamiento mediante
empalamiento, introduciendo una estaca por el ano,
sin tocar ningún organo vital, y se clavaba en el suelo, dejando así al
torturado hasta morir. Con este método, el condenado agonizaba a veces
durante días desangrándose o consumido por sus propias bacterias.
A pesar de usar
tan salvajes métodos, fue muy respetado durante su mandato. Se decía que
no había delincuencia, que se podía dejar en la calle un saco con oro
abierto, porque nadie lo iba a coger (no es
para menos). Vlad Tepes es un héroe nacional en Rumanía, ya que fue el
primer dirigente que se negó a pagar los tributos a los otomanos
(alimentos y niños, para alistarlos en las filas del ejército turco).
Repelió los ataques de Oriente, y empaló a los prisioneros
a lo largo del Danubio, frontera natural con Bulgaria y Dobrogea. Ver
este espectáculo echaba atrás al enemigo otomano, asustado por semejante
recibimiento fronterizo.
Dicen en Valaquia
que dejaba pan mojado en vino al lado de los cadáveres, para hacer
pensar que bebía la sangre de los muertos. Además, el empalamiento
dejaba a los cuerpos desangrados y blancos, y a veces
con marcas moradas en el cuello debido al límite de la estaca, que no
llegaba a sobresalir. Estas imágenes escalofriantes alimentaban
imaginaciones y leyendas vampíricas.
El que acabó por
hacer mundialmente famoso a Vlad Tepes fue Bram Stoker. El escritor
Irlandés se basó en él para el vampiro de su novela Drácula, y ambientó
la historia en su región natal: Transilvania.
De hecho, el terminio Dracul, no tiene nada que ver con vampiros, sino
con dragones. Actualmente, Drácula (o Vlad Draculea) es un reclamo
turístico de primer orden, y es insistentemente explotado por la
próspera y turística Transilvania.
Uno de los
ejemplos de como rentabilizan al vampiro es el castillo de Bran, aprovechando la
falsa creencia popular de que Vlad Tepes vivió en esta mansión. En teoría fue esta tenebrosa fortaleza la que inspiró
a Stoker para ambientar la residencia de Drácula. El resultado: la pintoresca población
de Bran es un circo turístico. A las autoridades rumanas no les hace
mucha gracia que este Castillo sea un parque vampírico – Temático,
ya que fue simplemente un palacio, con aspecto
tétrico por estar encima de un peñón. Pero la realidad es que el
príncipe valaco nunca vivió allí.
La residencia
real de Vlad Tepes fue el castillo de Poenari, en Valaquia, bajo los
montes Fagaras de los Cárpatos. Es bastánte más inaccesible que el
castillo de Bran. Esto si que era una fortaleza. En
la actualidad está en ruinas, y los que amenazan a los humanos no son
los vampiros, son los osos que merodean la zona, y que impiden la
visita.